Encontrar el equilibrio entre la vida personal y laboral puede ser un desafío para muchas personas, especialmente cuando el equilibrio financiero no es una realidad en nuestras vidas, cuando nuestro nivel de responsabilidad es elevado o cuando el pensamiento que reina en nuestra mente es “hacer para ser” o “tener para ser”.
Estas posturas acarrean algunos problemas e insatisfacciones, entre los que se encuentran el estrés, la falta de tiempo para actividades personales, la poca atención a los seres queridos y la sensación de estar siempre conectado al trabajo.
En especial, el estrés y el agotamiento vienen siendo de los problemas más comunes y que atentan contra la salud mental y física de las personas. El exceso de trabajo, las largas horas de labor y la presión para cumplir con los plazos pueden afectar notoriamente la estabilidad de una persona. Si a eso le sumamos la falta de tiempo para actividades personales y el compartir con la familia, tenemos una buena fórmula para generar estados de ánimo asociados a la frustración y la culpa.
Sin embargo, es posible lograr un equilibrio positivo entre la vida personal y laboral siguiendo algunas acciones, que hoy les sugerimos a través de este breve artículo.
Para lograr un equilibrio positivo entre la vida personal y laboral, es importante establecer objetivos y límites claros entre ambos mundos, así como desarrollar una conciencia plena del valor y trascendencia que cada una de estas dinámicas genera para nuestra vida.
El trabajo debe generar la posibilidad de cumplir metas y aspiraciones a nivel personal; es un medio para el desarrollo y el logro de objetivos y está asociado a lo que queremos ofrecer al mundo. La vida personal es lo que nos constituye y edifica nuestro ser; por lo tanto, está fundamentado en las relaciones, con nosotros mismos y con quienes nos rodean, de allí la importancia de la autovaloración y el cuidado de las relaciones interpersonales.
La sugerencia comienza por dedicarnos a una labor que se conecte con eso que nos gusta hacer, establecer límites claros en el tiempo laboral y respetarlos, aprender a delegar tareas y pedir ayuda cuando sea necesario, tomar descansos regulares durante el día para evitar el agotamiento, desconectarse del trabajo fuera del horario laboral y priorizar los espacios de atención personal y de compartir con nuestros afectos.
Lograr un equilibrio positivo entre la vida personal y laboral puede ser un desafío, pero trae consigo muchos beneficios, tanto para la salud mental, como física. Recordemos que en la medida que sumemos bienestar a nuestra dinámica diaria, lograremos una mayor satisfacción en el trabajo y en la vida personal, lo que redunda en menos estrés, buena salud y mejorará nuestra experiencia productiva.
Francer Goenaga
MSc. Gerencia Ambiental
Coach y mentor organizacional.
Grupo de Expertos de Job Center.